viernes, 10 de julio de 2015

CASTILLO DE COCA

El castillo de Coca en la Comunidad Autónoma de Castilla León es una especial y hermosa construcción militar.


Fue el rey Juan II de Castilla el que concede permiso en 1453 a don Alonso de Fonseca, Arzobispo de Sevilla  para que construya en la villa de Coca la fortaleza.
 Entre 1473 y 1496 se construye el cuerpo central de la fortificación  de forma cuadrangular y patio de estilo mudéjar.
Si algo hay que tener para visitar estas rotundas fortificaciones son unas buenas piernas. Nos esperan infinidad de escaleras de caracol, estrechas y empinadas.
 La torre del Homenaje conserva en su interior una sencilla Capilla en la que se exhiben unas tallas de alto valor artístico pero de autores desconocidos, épocas románica y gótica.

Seguimos ascendiendo por la torre y llegamos a una sala profusamente decorada   con pinturas del siglo XV de formas geométricas y diferentes en cada paño de la pared.
 Una colección de azulejos sevillanos  y toledanos  de los siglos XVI   y XVII.

Retomamos la escalera y seguimos ascendiendo .

Todavía se puede ver la decoración original en las diferentes salas que en su tiempo eran ocupadas por la familia Fonseca .
 Descendemos por la Torre de Pedro Mata  hacia la Sala de los Jarros. Es una sala con una acústica extraordinaria y como se puede ver en la imagen sus paredes están decoradas con jarros y detalles florales.

Como todo castillo que se precie no le falta la Mazmorra. ¿ Se ve el agujero ? Pues no he podido por lo estrecho y alto captar el espacio de la mazmorra. Pero funcionaba de la siguiente manera, al cautivo se le dejaba caer por ese agujero al suelo ... unos 5 m de altura, sí ! Si tenía suerte y se moría del batacazo, ¡perfecto! lo malo era si solo  sufría alguna lesión o fractura. Solo le quedaba esperar la muerte sin comida, sin agua sin ventilación, eso si , acompañado de los restos del anterior cautivo .

Sigamos el recorrido, ahora cambiaremos de torre .
 
A lo largo del recorrido nos acompañan los haces de luz de las aspilleras, típicas ranuras en los muros de los castillos fortaleza por donde se lanzaban las flechas, eso sí la abertura con forma de cruz.

 Y seguimos subiendo y más escaleras.
 Vale la pena el ejercicio cuando se alcanzan las almenas. La vista es poderosa. Por uno de los ventanucos defensivos podemos ver enmarcada la Torre de San Nicolás, antigua iglesia del siglo XII.

Mirar hacia abajo, hace que se pierdan las proporciones .

Hoy día el Castillo de Coca pertenece al Ministerio de Agricultura  cedido por sus últimos  propietarios la casa de Alba para que se instalase en sus dependencias la Escuela de Capacitación Forestal, además está considerado Monumento Histórico Nacional.


No hay que abandonar el lugar falta hacer el recorrido perimetral exterior. Un paseo tranquilo para admirar la grandeza del lugar.

Construido principalmente en ladrillo por alarifes sevillanos, lo del ladrillo toda una gran ventaja ante la piedra, que si recibe golpes se desquebraja y en cambio el ladrillo amortigua el impacto ¡bien pensado! y además tal y como se va viendo al rodearlo con muchísimo arte. Sello indiscutible del arte Mudéjar.
 Vale la pena releerse la historia para ver como sus muros contemplaron las idas y venidas de los poderosos que lo visitaron Como Beatriz de Bobadilla, aquella dama tan amiga de la reina Isabel y como esta reina tan poderosa, decretó que la fortaleza solo pudiese pasar  a herederos varones, ella que fue tan... mujer, o como sirvió de presión al duque de Medina-Sidonia que se había proclamado
rey de Andalucía ... vaya idea! que nadie piense que fue tirado por el agujero de la mazmorra, era un noble y había rescate y el dinero siempre ha contado.
Un castillo más de Castilla que vale la pena visitar, eso sí con buenas piernas para resistir todo el itinerario.

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