lunes, 26 de septiembre de 2016

UN DÍA EN LAGUARDIA


Sobre un montículo y visible desde cualquier punto se levanta la villa de Laguardia. Sus murallas fueron mandadas levantar por el rey Sancho el Fuerte de Navarra .  
La muralla de paredes de piedra de sillería y acabados con adarves almenados rodea la ciudad y a ella se accede por cinco puertas.

La plaza Mayor Plaza porticada
En ella está el Ayuntamiento Viejo y el Ayuntamiento Nuevo. Un reloj carillón  en la fachada  que a determinadas horas del día se abre y de él surgen unos autómatas que danzan un pasacalle típico de esta localidad cuando está en fiestas. Pude grabarlo y se puede ver y escuchar en el montaje que se encuentra al final de esta entrada.

Damos un tranquilo paseo por la villa esperando poder visitar un par de joyas arquitectónicas .
La Plaza del Gaitero
Los soportales en la Plaza Mayor
Fragmento de la muralla que rodea la villa.
Seguimos callejeando 


Llegamos a la Torre Abacial
Se la conoce así porque  en uno de sus muros hay un relieve de San Benito , se supone que era parte de un monasterio ahora desaparecido. Su función actual es de torre de la iglesia de Santa María de los Reyes .
Como es costumbre y hasta que mis piernas me lo permitan subo a la torre.
No puedo perderme la magnifica panorámica que desde ella se divisa.

Desde la Torre

Visita obligada es la iglesia de Santa María de los Reyes y su magnífico Pórtico .
El Pórtico es de los pocos policromados que se conserva en España. Se labró en piedra  a finales del XV y fue policromado dos siglos después. Este pórtico narra la vida de la Virgen que es acompañada por apóstoles y reyes.Las arquivoltas  que lo enmarcan están decoradas con esculturas que siguen las direcciones de los góticos arcos . Se ha mantenido así de bien gracias a que no da directamente al exterior.  A él se accede  por una capilla que es la que le ha servido de protección tras mas de cinco siglos.
Todo él es una joya del arte vasco. La virgen que es a la que está dedicado  nos recibe en el portaluz de la entrada, cabe destacar la postura de su cadera, se la conoce como  "contraposto" y es clásica manera de esculpir de los artífices del gótico francés.
El templo es de cruz latina con tres naves y un transepto. Pilares y bóvedas  de crucería estrellada con terceletes.
El Retablo Mayor es obra de Juan Bascardó , siglo XVII y de estilo manierista
Santa María de los Reyes es un edificio básicamente gótico pero una parte de él es de estilo renacentista debido a que se demolió la cabecera medieval y en su lugar se edifico a la manera de la época

Una mirada a los campos que rodean Laguardia nos lleva a las muchas bodegas que por la zona existen.
En anterior entrada publiqué la visita a la que destaca  sobremanera  por lo original de su arquitectura
Las Bodegas Ysios 



Y antes de cerrar esta entrada la curiosa obra del escultor Koko Rico que se encuentra en la Plaza del Gaitero y que por su originalidad  es imagen que no puede faltar en el recorrido callejero de la ciudad de Laguardia.
Son dos placas, aquí pongo una imagen, la obra completa se ve en el montaje que va  a continuación.
Dos placas a forma de mesa Una contiene diferentes tipos de calzados la otra diferentes bolsos, las dos son conocidas como " Los viajeros ".



lunes, 19 de septiembre de 2016

CON DOS COPAS ....

Con dos copas  en la sala de catas de las bodegas Ysios.
 La cata se realizó al final de la visita. Y no se puede pensar que los encuadres fotográficos son debidos al vino, sencillamente por que los hice antes y la mayor razón porque las fotos que vienen a continuación pertenecen sin ningún tipo de alteración a la obra del arquitecto Santiago Calatrava.

 En linea recta y a través de las magnificas cristaleras casi suspendidas en un equilibrio de vértigo podemos ver la población de Laguardia en la Rioja Alavesa.
 Ysios es Laguardia y Laguardia el camino más corto entre dos puntos en el plano.
 Los picos agrestes  de la Sierra de Cantabria en la Rioja Alavesa  son el fondo inspirador del diseño del arquitecto Santiago Calatrava para el enclave idóneo de Ysios.
 Las onduladas techumbres de aluminio sobre pilares de madera  son las lineas que recuerdan una hilera de barricas.

La parte central del edificio es un desafió al encuadre . He conseguido completarlo a base de ensamblar varias imágenes , una perspectiva desafiante y realmente hermosa. Ahí se me ve diminuta en el reflejo .



La estructura de la moderna bodega rodeada de viñas con canal y tejado ondulante está inspirada, nos dice su arquitecto en el mito de la diosa Isis , protectora de la Naturaleza .

Es un verdadero reto fotografiar este lugar. Inmenso, con lineas difíciles de someter a un solo encuadre, con curvas de tan ligera suavidad que se te escapan por los ángulos  y si además se quiere captar la esencia del lugar que es la viña ... es de triple dificultad , pero lo conseguí !
Esta es una de las fotos que más me ha costado , las vertiginosas y laceradas lineas de los tejados enmarcadas por los tallos de la vides , si me gusta.
 Sigo rodeando el espectacular edificio son las 10 de la mañana y el sol cae implacable pero no puedo dejar de admnirar este fastuoso templo al vino que son las bodegas Ysios.
 Su nombre Ysios está inspirado en Isis y para completar la idea Calatrava, el arquitecto bordea el edificio con unos   trasparentares canales recordando al   Nilo.


Si el exterior es único el interior nada tiene que ver con el concepto de bodega que hasta ahora se ha tenido.
 Toneles sinuosamente colocados, milimétricamente datados, firmados y acuñados. La luz entra a raudales y son las nuevas tecnologías las encargadas de mantener las constantes necesarias para que los vinos lleguen a ser reservas excepcionales.
Con una cubierta tan arriesgada Calatrava aparte de la originalidad y para no faltar a su estilo también en esta obra tuvo su tradicional conflicto, pero según nos cuentan la voluntad de los señores de Ysios prevaleció y hoy todo subsanado se yergue  a los pies de la Sierra de Cantabria emulando sus agrestes picachos 

jueves, 8 de septiembre de 2016

LEYENDAS Y COCINA EN EL MONASTERIO DE IRANZU

Por tierras de Iranzu.  
Como tiene que ser que siempre ha sido, los monasterios los encontramos alejados del mundanal ruido . Allá donde Cristo perdió el gorro ¿o eran las zapatilla?. El caso es que para llegar a Iranzu ... no es que sea difícil pero hay que ir con plano y cuando  estas llegando no acabas de verlo porque hay que atravesar un angosto desfiladero , pero llegas.
Los monjes allá por el siglo XII buscaban para establecer sus casas lugares apartados y con agua y este lugar lo tiene todo eso y más.

Santa María de los helechos porque es eso lo que significa en euskera. Es un lugar precioso.

Las ruinas de la iglesia de San Adrián guardan los primeros vestigios de los monjes que hasta aquí llegaron . La Iglesia es lo primero que construyeron allá por el siglo XII y a continuación emprendieron la construcción del  monasterio.

Iranzu guarda mitos y leyendas muy curiosos.

El Organista loco
Cuenta la leyenda que el organista del monasterio, un monje llamado Jerónimo  que por su arte musical era conocido a muchas leguas del lugar, andaba triste desde que las leyes de desamortización menguaban las posesiones monásticas . Un día lluvioso y triste se mando quitar el órgano del monasterio, Jerónimo se volvió loco de tristeza al no poder dedicar sus notas al altísimo y en su locura llegó su muerte, pero moribundo pidió que se le enterrara entre las ya ruinas del monasterio. La leyenda dice que los días de lluvia y fuerte viento se oye al monje ejecutar su triste melodía entre las ruinas.
El monje Dulaz
En las cercanías del monasterio existe un monte llamado Dulaz. Dice la leyenda que allá por el siglo XIV llegó al monasterio un monje francés , sabio y conocedor de muchos remedios sanadores, pero las gentes del lugar le temían incluso le tildaban de brujo. En el monasterio los monjes estaba muy contentos con él ya que con sus remedios y curas se beneficiaban . Un día el abad enfermó, pero solo informó de su dolencia a Dulaz, este salió diligente del convento a buscar las hierbas necesarias que la naturaleza ofrecía por aquellos lugares para poder realizar la cura que su abad necesitaba . Era invierno y una nevada le impidió regresar. Pasado el invierno el abad mandó buscarlo y se le encontró muerto en la nieve , pero con una sonrisa en sus labios. y aquel lugar lleva su nombre.

Conjuro a Domingo de Aoiz
Una leyenda del siglo XVII cuenta que cuando un exorcista de un remoto lugar nórdico lanzaba sus conjuros contra el maligno que estaba empleado haciendo el mal en algún desgraciado poseso al abandonar el cuerpo de su victima y en venganza , en ese preciso instante perdía la vida un monje en el cenobio navarro de Iranzu. Estudiosos han buscado cronologías y coincidencias y dicen y cuentan que sí, que el abad Domingo de Aoiz falleció por esas causas ... 

Y con estas historias llegamos a un precioso, luminoso y artístico lavatorio bajo templete emplazado en el claustro. Por el pasaban los monjes para lavarse antes de pasar al comedor.

La cocina del monasterio de Iranzu
Una de las más espaciosas que he visto hasta ahora en mi recorrido de monasterios cistercienses.

Parece que en los primeros tiempos los monjes seguían reglas muy estrictas a la hora de alimentarse.
Eso es lo que te cuentan . Que si no comían carne ni pescado que se alimentaban de los productos de sus huertas, que el vino o la cerveza no faltaba , gracias a lo bien que cuidaban, sus viñedos ...
Y cuando estás entre estas inmensas construcciones es cuando surge la curiosidad y las preguntas , muchas preguntas.
 Recorres la gran cocina y ahí están los pocos útiles que nos quieren contar sus historias, pero no siempre la austeridad reinó entre sus muros . Privilegios siempre han habido y al principio la alimentación de jóvenes y ancianos o enfermos permitía algunos extras. En otros momentos los abades que siempre acostumbraba a comer con aquellos que en calidad de huésped se encontraba a la hora de comer, podían  proceder a saltarse la austeridad. Por unos motivos o por otros los pensadores de la orden más de una vez tuvieron que reestructurar las normas para que no hubieran demasiados  alteraciones . Hubo momentos de mucha austeridad , pero también los hubo de todo lo contrario. Hoy solo quedan las piedras que nos hablan en voz muy muy baja .

En el montajillo que pongo a continuación, un paseo por la iglesia abacial , el claustro, la sala capitular y todo lo visitable de este precios monasterio cisterciense .