Sant Jaume
En el recorrido que hicimos sobre las iglesias más antiguas de Barcelona, esta fue la última.
El rayo de luz que se estaba colando por una de las aberturas de la cúpula me pareció de lo más interesante, visualmente hablando.
Este lugar también ha sido desmembrado a lo largo de los siglos. Construido sobre restos romanos, reconstruido y elevado por la espiritualidad se dice que con tendencia judía en sus inicios y transformado al catolicismo por el poder eclesiástico del momento que marcaba la historia.
En la fachada, única y principal que da la calle un relieve interesante . ¿ Qué simboliza un libro y una estrella, ese sombrero, una vara con calabazas y una espada ? Una Tora, un apóstol Santiago, del que se cuenta que estuvo en este lugar.
Estamos al ladito mismo de la Plaza de Sant Jaume y empezamos a zigzaguear en nuestro tranquilo recorrido.
Esquinas que doblan décadas.
Un hermoso edificio incomprensiblemente cerrado e inactivo nos recuerda que el Carrer Aviñó tiene mucho, pero que mucho que ver con el famosos cuadro de Picasso, las señoritas de Aviñó, este es el lugar de aquellas señoritas, ellas trabajaban, se las podía encontrar en más de una casa de esta calle y Picasso las frecuentaba.
Barcelona presume de sus Pasajes, incluso podemos leer libros dedicados en exclusivo a ellos.
Las imágenes que vienen a continuación son tomadas de los que podemos encontrar callejeando por los alrededores de esta zona de Barcelona, pero los hay por todos los barrios.
Me gusta fotografiarlos. Son como pequeñas cicatrices que perduran sobre una piel de ciudad que crece e intenta regenerarse, pero los pasajes perduran y cada uno de ellos tiene su historia, como las marcas de una vieja piel.
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